Los estudios están desapareciendo por muchas y diferentes razones:
- La aparición de los “home studios”. (el abaratamiento y el progreso de la tecnología ha hecho posible grabar en casa con calidad digital).
- El descenso de inversión en la grabación de discos por parte de las grandes compañías , como consecuencia de la crisis que ha provocado la piratería en la red y el “top manta”
- Las condiciones de la “crisis” generalizada que machaca todos los sectores.
- El alejamiento cultural de los jóvenes de la calidad del sonido y la irrupción del sonido comprimido, el mp3. Hay muchos adolescentes que desconocen que el mp3 es una mala muestra del sonido original de una grabación.
Pero hay una cosa cierta. Un estudio de grabación profesional es mucho más. Es un lugar perfectamente insonorizado del exterior y que posee un estudio de ingeniería de la acústica de su espacio lo que le confiere unas condiciones únicas para el registro del sonido en óptimas condiciones. El espacio y sus divisiones, sus trampas acústicas, los materiales con los que está construido, sus medios técnicos y sus ingenieros de sonido.
Todos los músicos sabemos que en casa no es fácil grabar una buena batería, una orquesta de cuerda, una sección de metales, etc. Por eso la opción de convivencia entre los “home studio” y los estudios profesionales no solo es posible sino que es conveniente. Son muchos los artistas que registran el sonido en casa y luego vienen a grabas las baterías, la cuerda y por supuesto a mezclar.